La primera Yamaha 600 XT Ténéré se comercializó en 1983, se han cumplido 30 años y la Ténéré sigue siendo una máquina a tener en cuenta. A quién le gusta el raid, el trail y tiene más de 40 años… como no se va acordar de la XT Ténéré, con su nombre indica el desierto más duro, y en nuestra memoria tenemos las primeras imágenes del Paris Dakar. Las primeras XT eran derivadas de la famosa XT 550, pero con unos cambios más que sustanciales, creo que se podría decir que la Xt 600 fue una máquina nueva, por ejemplo el árbol de levas montado sobre tres paliers, el aceite ya no está situado dentro del chasís sino en un depósito separado, las suspensiones monocross que substituyen a los dos amortiguadores tradicionales clásicos ganando 45mm de altura, y por supuesto el freno delantero en 1983 presentó un “moderno” disco delantero de 267mm, y se deja en desuso el tambor. El freno trasero es de tambor de 150mm. El motor de 4T refrigerado por aire daba 43 CV a 6500 rpm con una compresión del 8,5:1 Y alimentado por un Mikuni de 27 mm, el cárter seco con circulación de aceite en continuo del contenido 1,7 litros de aceite. Caja de cambios de 5 marchas, los neumáticos de delante 3.00 y 21 pulgada, detrás 4.60 x 18’ Lo mejor de todo su peso: 138Kg, velocidad máxima 150 km/h, y el depósito de 34 litros para el primer modelo vendido en Francia, y después de 30 + 2 de reserva para modelos posteriores. Una máquina que me tiene enamorado… El primer modelo sólo disponía de arranque a patada con descompresor automático, después incorporó arranque eléctrico.

En 1985 se homologa la nueva Ténéré Tipo 55w, con el asiento de color rojo con protector de disco de origen y se modifica la desarrollo final. En 1986 y 87 se introduce el arranque eléctrico más el “Kick” de toda la vida y que te saca de muchos apuros… y muchas reformas invisibles pero que se notan un montón como el volante del alternador, nuevo cojinete del cigüeñal y el motor queda un poco más alto, el depósito pasa de 32 a 23 litros, eso si con dos grifos de gasolina uno para cada lado. Se trata de compensar el peso del “demarreur”, a partir del 1988 las nuevas XT son fácilmente reconocibles por su dobla óptica delantera que forma un pequeño carenado al estilo Dakar. Del 1990 se pierde la palanca para arrancar a patada y toma una orientación más turística, ya deja de ser la trail Yam y consecuentemente engorda a 185 kg, A finales 1990 Yamaha presenta una nueva Ténéré, pero es otra historia, se trata de la 660.

¿Qué tener en cuenta para comprar una Ténéré? Pues lo primero el depósito, no es fácil de reparar las abolladuras de esos 32 litros, cuidado con el óxido interior, poner el líquido reparador de interiores depósito, no es fácil por lo grande y sus formas. Atención a los accesorios de goma y de plástico, como tapas, las gomas de los amortiguadores, que los años afectan mucho y cambiarlos no es evidente. Inspeccionar el cubre cárter, es decir el protector de cárter… pues puede que pierda aceite y no gotee pues queda encharcado dentro del protector de cárter. Y por último me fijaría el carburador, si lleva años parada la membrana de depresión puede estar tocada y puede hacer fallos de alimentación o petardeos o como falsas explosiones, hay que cambiarla. Mirar las llantas que no estén magulladas, y que se ponga en marcha bien.

La pregunta del millón: ¿Cuánto cuesta? Una moto para restaurar completamente 600€, una moto original en muy buen estado 1.500€, y una perfecta en estado de concurso de restauración 2.500€… la pregunta es: ¿Alguien da más por menos?

Para saber mas:

MAIL CLUB TÉNÉRÉ

Y el libro: “Yamaha. El mono mitico, toda la historia de las XT” de Marc Unau editorial Larivière 255 páginas en Francés.